Videoanálisis
Juan José Madueño: «Se ha perdido otra vez el principio de autoridad con el narco»
El ataque al coche de la juez que instruye el caso 'Barbate' y la entrada constante de lanchas cargadas de cocaína muestran una regresión
El líder del clan de narcos de «Los Pantoja» se da a la fuga aprovechando un permiso penitenciario
El 9 de febrero de 2024, dos guardias civiles fueron asesinados en el puerto de Barbate. Fueron arrollados por una narcolancha delante de una multitud que vitoreó el crimen. Convirtieron aquel dique en un circo romano. En marzo de ese mismo año, otra multitud intentó ... asaltar el cuartel de Barbate. Les decían a los que estaban dentro: «Os tenía que pasar como a los del puerto». Esta misma semana, la jueza que instruye el caso Barbate por el asesinato de los dos guardias civiles ha visto como le destrozaban el coche. Se está perdiendo el principio de autoridad otra vez en las costas de Andalucía.
Los hechos recuerdan a 2018. En febrero de 2018, una multitud entró a un hospital para liberar a Samuel Crespo cuando estaba detenido. Samuel Crespo es un destacado narcotraficante, lugarteniente de Los Castañitas, una de las principales organizaciones del Campo de Gibraltar. Pero entonces se pusieron medios. Entonces el Ministerio de Interior reaccionó.
Creó un plan especial de seguridad para el Campo de Gibraltar, que luego extendió a la Costa del Sol y luego extendió a toda la costa de Andalucía y creó OCON-Sur, un organismo especial que puso coto a los narcotraficantes. Se sucedieron las incautaciones, las investigaciones, las detenciones y se les puso cerco, pero se desarticuló. Aún se están dirimiendo las causas por las que se hizo y desde entonces la puerta sigue abierta.
Se han vuelto a abrir las puertas de las costas de Andalucía, mil kilómetros de costa abierta al narcotráfico. Las lanchas, ahora cargadas de cocaína, entran hasta Sevilla, suben por el Guadalquivir, hasta Sevilla, entran por Almería, entran por Huelva y se ven abandonadas en las costas de Málaga. No hay medios. No hay personal. Y al final acabaremos lamentando la muerte de otros dos guardias civiles, como en el puerto de Barbate.
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